Marta es Licenciada en Gestión de la Educación Primaria.
Fue docente y ocupó cargos directivos en la escuela desde el año 1990 hasta 2017.
Por Marta Milesi
Se abre el telón, la escuela se pone en movimiento, la obra está por empezar, los personajes se preparan y se enciende esa chispa vital para que todo suceda, de manera espontánea o programada, cada uno con su talento, su impronta y así… los niños, maestros, profesores, bibliotecarios, psicopedagoga, secretaria, los porteros, los padres y la escuela toda,…se animan, aparecen y se muestran.
Despierta la escuela, con algunos bostezos, aires a sueños y trenzas recién hechas…irrumpe el timbre o la vieja campana anunciando la rutina del horario escolar.
Es una especie de ritual que nos convoca a esa reunión solemne pero cotidiana frente a la Virgen y la Bandera. Mientras las saludamos suenan tímidamente las notas de las canciones elegidas y ahí mismo, comenzamos a mirarnos, a reconocernos en este espacio común, Estamos todos y puedo sentirlos antes de que me respondan al… ¿Cómo están? ¿Qué hicieron el fin de semana?¿ Quién cumple años hoy?… Surge sin darnos cuenta, el saludo afectuoso al cumpleañero o el aplauso prolongado ante el nacimiento de un hermanito.
Un día en la vida de la escuela, es oportunidad, aprendizaje, encuentro, risas, juegos, rezos, sorpresas… Pero ningún día es como todos los días.
No puedo imaginarme la escuela de hoy, sin todo esto, acompañada de abrazos, besos, meriendas compartidas, rondas de historias, preparativos de viajes, Actos de Colación,…¡Y sin niños! los protagonistas y héroes de estos tiempos jamás vividos.
Vamos entonces a recorrer juntos este relato de lo que sucede, bueno, lo que sucedía y volverá pronto, en un día o muchos de ellos, donde se van a reconocer, descubrir y quizás algunos nos puedan conocer a través de él. Lo voy a hacer “muy a mi manera”, que en el andar se convertirá en la “manera de todos”, la propia, la nuestra.
¡Que tengan un lindo día de trabajo! y así concluíamos este primer momento. Pero luego venían otros y otros, que se iban sucediendo, uno a uno o simultáneamente, había que atenderlos y estar un poco en cada lado.
Entonces me acercaba a las salas para compartir alguna experiencia, una clase especial, o una canción,… Algo que era importante para ustedes. Ni hablar cuando los pasillos se inundaban de ese olorcito a pan casero, sabrosas galletitas,…
Podía mirar los ensayos que anunciaban por cierto “un acto”, donde la escuela se vestía de fiesta, todo era alegría, expectativa y muchos invitados.
Si algún grupo estaba en la plaza, me llegaba para verlos dibujar o simplemente jugar.
Podía pasar que se fueran de caminatas hasta la playa, o por el barrio, corría para alcanzarlos,.. a veces a la librería para elegir y comprar sus cuentos preferidos…
El día de los Talleres, llegaban con tanto entusiasmo, lo esperaban ansiosos y yo…me sentía feliz.
Días de “pensar la escuela”, reuniones con los maestros, padres delegados, Escuela Especial,…revisar, acordar, proponer y poner en marcha nuevos proyectos, nuevas ideas, nos convocaban. A veces, reacomodar la marcha. Sin faltar, para todos,¡ los agradecimientos y felicitaciones por los logros!!!
Y en ese contemplar la escuela, están los días de escuchar, como dice el Papa Francisco: – “Lo voy a decir en un lenguaje vulgar: prestar la oreja” ¿A quiénes? A todos y cada uno que necesitaba expresar una necesidad, una inquietud, una alegría o una preocupación.
Podemos pasar por nuestra memoria también el “Días de la Virgen” un día especial, recibiendo desde muy temprano a los peregrinos, en nuestra Posada, con regalitos para ellos, canciones, y en ese dar y recibir, Ella nos bendice.
Y en las idas y venidas, se cruzaban las preguntas: Directora, ¿me llevás a tu oficina? ¿Cómo recordás el nombre de todos? ¿Te gusta estar con nosotros? Y junto a ellas, los abrazos envolventes, besos y miles de besos. Los amo profundamente, hasta en las peleas, retos y promesas, en nuestras charlas cotidianas.
Y la obra llegaba a su punto culmine, en la cima de una montaña por allá en Mendoza o Córdoba, con esos días que quedan grabados por siempre en nuestros corazones.
Con un: ¡Hasta mañana si Dios quiere “ nos despedimos. La obra casi termina, mañana la función vuelve a empezar, se hará a la manera guadalupana, la propia, la nuestra.
Entonces, ,¿ cómo es un día en la vida de nuestra escuela? Con todo eso y mucho más…podemos elegir cómo vivirlos, hay tantas maneras de ser y sentir, de permanecer y transcurrir,…
Vienen a mi memoria y tarareo, son los versos de Eladia Blázquez,
Porque no es lo mismo que vivir…
¡Honrar la vida!
Honrar la vida en la escuela, nos enaltece profundamente.
Es exaltar, destacar, dar oportunidad, confiar, es entrega, es puro amor,…
¡Es una virtud, es dignidad!
Y es la actitud de identidad ¡más definida!
Patricio Cullen 7397. Santa Fe. Argentina.
primario1147@escuelansguadalupe.edu.ar
Nuestra propuesta educativa se percibe en el accionar diario, a través de los ritos que nos hacen uno y los diversos recorridos, que nos hacen comunidad. En la catequesis de entrada rezamos a Nuestra Madre de Guadalupe y le pedimos por nuestras familias, amigos… celebramos los cumpleaños y nos alegramos ante las buenas noticias que compartimos.
Somos la escuela de Guadalupe: una institución inclusiva, pluralista, donde la diversidad es concebida como un valor humano y que se manifiesta a través de las diferencias… De esta manera, los niños y sus docentes trabajan en proyectos interáreas, posibilitando tener una mirada actual y global de las problemáticas que se abordan.
Creemos en una educación abierta, dinámica, solidaria e inclusiva. Es por ello que pensamos en proyectos que abordan al niño de manera integral…
Tantas valiosas experiencias podríamos mencionar pero hay una que sobresale porque es un tiempo muy ansiado por los niños: los talleres. Una vez a la semana cada salón o espacio se transforma en un taller de ciencias, origami, ajedrez, cocina, ecología, reciclado… propuestas a las que acceden de acuerdo a sus intereses y libre elección. Así, la escuela se transforma en espacios que responden a la “Teoría de las Inteligencias Múltiples”, poniendo en práctica, haciendo presente y vivencial, nuestro ideario institucional.
Porque indudablemente comprendemos que no hay una única forma de aprender, es que consideramos primordial dar a todos los niños la oportunidad de desarrollar al máximos sus posibilidades, a través de propuestas pensadas en y para ellos y sus familias:
Proyecto de merienda compartida.
Asambleas áulicas, acuerdos de convivencias…
Propuesta de Talleres.
Participación en las Olimpiadas de matemáticas «Ñandú».
Campamentos y salidas educativas.
Proyecto de biblioteca.
Visita de profesiones y escritores.
Proyectos que involucran a las familias.
Proyecto de Educación para el Amor.
Vinculación con otras instituciones del barrio y la ciudad. Trayectorias compartidas con diversas Escuelas Especiales de la ciudad:
Escuela Bilingüe para sordos e hipoacúsicos «Nils Ever».
Escuela de Educación Especial Nº 2083.
Escuela de Educación Especial Nº 1429 «Dra. Sara Faisal»
Taller para padres: «El Alfarero».
Talleres para padres sobre alfabetización en Matemática y Lengua.
Cuando la familia y la escuela forman puentes firmes, nuestros niños caminan seguros, se convierten en buenas personas, son felices y se preparan la vida.